martes, 27 de enero de 2009

Amargo retorno


El pasado día 21 de enero Perdidos volvió a la parrilla televisiva en los Estados Unidos con un especial de una duración de casi dos horas en las que se emitieron los dos primeros capítulos de la quinta temporada, anunciada como la penúltima de la saga.

La expectativa era tal que no sólo en el país del recién estrenado Obama se esperaba con ansia el regreso de las andaduras y dichas de los pobladores isleños, sino que a lo largo y ancho del globo se guardaba un respetuoso silencio ceremonial ante la inminente llegada de un tren largamente demorado. Fans, losties y demás aficionados, sin olvidar a los consabidos freaks que suelen acompañar siempre a series de esta magnitud contaban las horas y minutos para el retorno de su serie favorita, que no les ha dejado prácticamente respiro desde aquel lejano 22 de septiembre de 2004 en la que se estrenó.

Pero a pesar de todo ello llegó la noche del estreno y los números hablaron por si solos: un pobre bagaje de apenas doce millones de share, que contrastan con cotas del doble alcanzadas por la misma producción en momentos algidos de la pasada etapa.

¿Qué ha ocurrido?. ¿Demasiada competencia para Perdidos?.

Hoy he tenido finalmente la oportunidad de poder disfrutar de los dos primeros episodios y la verdad es que francamente se otea un cierto bajón de intensidad en la primera entrega, que se ve sin embargo inyectada de nuevo con un segundo capítulo de una interesante factura.

La expectativa de millones de espectadores es muy alta y a bien seguro que Abrams, Lindelof y compañía se habrán llevado las manos a la cabeza al obtener los primeros resultados de la audiencia en el debut de esta temporada entrante; y es que no olvidemos que es ésta la que dicta sentencia en todo caso. Implacable como tal no dudaría en temblarle el pulso para condenar al ostracismo a una serie de genial planteamiento sobre la que sobrevuelan de nuevo las dudas sobre si es capaz de competir con otras producciones de cadenas rivales al mismo horario.

A buen seguro que el guión nos tiene preparadas mil y una perrerías que darán más vueltas de tuerca si cabe a un guión intrincado de por si, nada desdeñable desde luego. Con casi toda probabilidad la audiencia volverá y la serie recuperará ante los escépticos esa confianza renovada que conducirá al buque ante la resolución de todas las incógnitas planteadas y que no han sido resueltas a día de hoy.

El tiempo hablará.

La canción de la semana: Swollen summer (The Bravery)

sábado, 24 de enero de 2009

Tributo a Benny Hill

Un primer homenaje a uno de los mejores humoristas de la historia: el británico Benny Hill; en este caso en uno de sus más destacados gags, ambientado en un hospital.