El diccionario define a la palabra anglosajona "remix" como "una mezcla alternativa de una canción en un estudio de sonido, para darle un nuevo aspecto sonoro o mejorar la calidad de sonido, a veces con la incorporación de nuevos ritmos y efectos".
Parece que en los últimos años la producción musical va pareja en determinados pasajes a la re-interpretación de grandes clásicos de la música, lógica gran fuente. Estilos tan dispares como el dance, pop, house o hip-hop beben de dicho manantial, creando nuevas piezas que incluso en varios casos llegan a distar mucho de la original.
El primer ejemplo que comento es Hot stuff, obra original de Donna Summer y versionada (para mí gusto de una forma muy acertada) por las californianas Pussycat Dolls en el álbum PCD, el de su estreno en el panorama musical para el gran público.
La original era una obra muy bailable, que en éste caso adquiere con su lavado de imagen unos nuevos ritmos más próximos al R&B o incluso al pop, que al dance de la lanzada comercialmente por Summer en 1979.
Los británicos Electric Light Orchestra estrenaron el mismo año un "single" titulado Shine a little love que cosechó un notable éxito en su momento, que contribuyó a que el grupo se granjease más seguidores. Fue en 2005 cuando Lovefreekz retomó el tema y lo relanzó con el título acortado de Shine, consiguiendo formar parte de la mayoría de recopilatorios de música dance del año.
La composición dista mucho de la original. Se mantienen los acordes de la canción en la que se basa, pero acortando la parte lírica de la obra por un aumento notable del aspecto instrumental.
Como habreis visto nuestro artículo era un homenaje al grupo estadounidense The Doors, grupo clave en el desarrollo histórico del rock. En éste caso el reconocido artista Snoop Dogg, auténtico revolucionador del Hip-hop a finales de los años noventa, hace un remix que cuenta con varios elementos del original, poniendo un especial énfasis en la transición de los acordes rítmicos que en la mayoría de casos se encuentran acompañados de lírica.
A pesar de que no cuenta con el encanto psicodélico de la original es una pieza sumamente agradable de escuchar. Tema de apertura de la banda sonora del popular videojuego Need for speed underground 2 es para muchos uno de los mejores trabajos de Snoop Dogg.
El último de los ejemplos está bautizada como The sound of San Francisco, obra del grupo Global Playboys, y basada en una pieza de los años sententa titulada San Francisco (be sure to wear flowers in your hair) del dúo formado por John Phillips (compositor) y Scott McKenzie (cantante). Desgraciadamente para muchos la versión original no es muy conocida, llegándose al extremo de que algunos tan sólo la conocían de oidas gracias a la contribución interpretativa a capella del actor Sean Connery de la misma en una escena del largometraje La roca.
La versión que os he ofrecido es totalmente diferente a la original sino fuese por la excepción de que la nueva versión toma el contenido del estribillo.
Ejemplos dispares de una realidad en la actualidad de la música. Los remixes venden, y esta sucinta selección de éstos es muestra de ello.
Parece que en los últimos años la producción musical va pareja en determinados pasajes a la re-interpretación de grandes clásicos de la música, lógica gran fuente. Estilos tan dispares como el dance, pop, house o hip-hop beben de dicho manantial, creando nuevas piezas que incluso en varios casos llegan a distar mucho de la original.
El primer ejemplo que comento es Hot stuff, obra original de Donna Summer y versionada (para mí gusto de una forma muy acertada) por las californianas Pussycat Dolls en el álbum PCD, el de su estreno en el panorama musical para el gran público.
La original era una obra muy bailable, que en éste caso adquiere con su lavado de imagen unos nuevos ritmos más próximos al R&B o incluso al pop, que al dance de la lanzada comercialmente por Summer en 1979.
Los británicos Electric Light Orchestra estrenaron el mismo año un "single" titulado Shine a little love que cosechó un notable éxito en su momento, que contribuyó a que el grupo se granjease más seguidores. Fue en 2005 cuando Lovefreekz retomó el tema y lo relanzó con el título acortado de Shine, consiguiendo formar parte de la mayoría de recopilatorios de música dance del año.
La composición dista mucho de la original. Se mantienen los acordes de la canción en la que se basa, pero acortando la parte lírica de la obra por un aumento notable del aspecto instrumental.
Como habreis visto nuestro artículo era un homenaje al grupo estadounidense The Doors, grupo clave en el desarrollo histórico del rock. En éste caso el reconocido artista Snoop Dogg, auténtico revolucionador del Hip-hop a finales de los años noventa, hace un remix que cuenta con varios elementos del original, poniendo un especial énfasis en la transición de los acordes rítmicos que en la mayoría de casos se encuentran acompañados de lírica.
A pesar de que no cuenta con el encanto psicodélico de la original es una pieza sumamente agradable de escuchar. Tema de apertura de la banda sonora del popular videojuego Need for speed underground 2 es para muchos uno de los mejores trabajos de Snoop Dogg.
El último de los ejemplos está bautizada como The sound of San Francisco, obra del grupo Global Playboys, y basada en una pieza de los años sententa titulada San Francisco (be sure to wear flowers in your hair) del dúo formado por John Phillips (compositor) y Scott McKenzie (cantante). Desgraciadamente para muchos la versión original no es muy conocida, llegándose al extremo de que algunos tan sólo la conocían de oidas gracias a la contribución interpretativa a capella del actor Sean Connery de la misma en una escena del largometraje La roca.
La versión que os he ofrecido es totalmente diferente a la original sino fuese por la excepción de que la nueva versión toma el contenido del estribillo.
Ejemplos dispares de una realidad en la actualidad de la música. Los remixes venden, y esta sucinta selección de éstos es muestra de ello.
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