
Sin embargo su vuelta irá aparejada al protagonismo secundario de toda una serie de marcas que han visto en el próximo largometraje de James Bond un auténtico filón del que aprovecharse. Así el agente secreto al servicio de Su Majestad sustituirá su ya clásico vermouth ya agitado en exceso por el seco vodka, lo que se traduce en un cambio de Martini a Smirnoff. Sus llamadas de teléfono las realizará gracias a la intercesión de nuevo de un Sony Ericsson C902, conducirá de nuevo un flamante Aston Martin DBS y consultará la hora en un espectacular Omega Planet Ocean. Y luego hablan de la publicidad de los pilotos de Fórmula 1...
Sin embargo cobra un protagonismo especial la llamativa campaña que ha realizado Coca Cola relacionada con el film, en el que se pretende que su nuevo producto Coca Cola Zero se alinee con los gustos masculinos. Al parecer la ya denostada publicidad de la Light casó tanto con la mujer que se ha decidido darle un impulso varonil a la nueva bebida refrescante de la factoría de Atlanta.
A pesar de ello no son más que curiosos alicientes a observar en una película que espera sorprendernos más que la imprescindible Casino Royale.
2 comentarios:
El uso de fragmentos instrumentales de la canción del film, compuesta por Jack White, parece que cabreó bastante al compositor.
Buena la foto de Gemma Arterton.
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