miércoles, 14 de mayo de 2008

The Doors


The Doors, considerada por muchos la mejor banda de rock & blues de la historia de la música, protagoniza hoy la sección Jukebox, en la que como siempre se os presentan artistas que por su peculiar estilo en diferentes géneros han contribuido en sobremanera al panorama musical.

Por desgracia desde su nacimiento (1965) hasta su completa disolución (1973) realmente pasó un relativo corto espacio de tiempo para la vida de una banda que, sin embargo, marcó una época y ha influido en décadas posteriores a múltiples grupos.

¿Pero quiénes eran The Doors?.

El grupo del que os hablo lo formaban cuatro miembros: Jim Morrison (vocalista), Ray Manzarek (tecladista y bajista ocasional), Robby Krieger (guitarrista y armónica) y John Densmore (batería). Tras el fallecimiento del primero el grupo siguió durante dos años sus andaduras con mayor o menor éxito, hasta la extinción del conjunto. En cuanto al nomnre del mismo cabe decir que se basa en una de las obras del novelista Aldous Huxley, The doors of perception.

Sus inicios se remontan a un año anterior al de la creación de la banda, 1964. Ese año Morrison (la verdadera alma de The Doors) comenzó su peculiar reclutaje de los demás miembros que en pocas semanas conformaban el grupo. Su camino por los clubs de Santa Mónica (en California) fue meteórico, hasta el punto de que el año 1966 pudieron lanzar al mercado gracias a la edición de la compañía musical Elektra Records el que fue el primer álbumb de la banda, que portaba como título a modo de presentación el nombre de la banda. En una época del rock estadounidense dominada claramente por Jefferson Airplane intentaron sin embargo hacerse con un hueco en el mercado con su peculiar sello.

Para los que hayais disfrutado de la audición de dicha obra estareis conmigo en que es sencillamente una pieza exquisita, claro exponente del rock de los años sesenta. Una de las canciones del álbum era The end, popularizada de forma masiva para generaciones como la mía gracias al largometraje, dirigido por el genial Francis Ford Coppola, Apocalypse Now. Según la revista Rolling Stone el álbum se encuentra en el puesto 43 de entre los 500 mejores de la historia de la música rock.

A éste siguieron hasta nueve álbumes de estudio más, entre los que destaca, al menos a mí parecer L.A. Woman que supuso la consagración absoluta de la banda en el panorama musical mundial. La armónica composición psicodélica de sus temas le convierte en un auténtico imprescindible para comprender la intención de unos virtuosos; la manera ideal de observar el desarrollo de The Doors a lo largo de los años.

Probablemente es éste último extremo uno de los elementos más característicos de la banda ya que como ocurre en el caso de otra mítica como The beatles, podemos observar claramente la mutación evolutiva del grupo bajo los acordes del rock experimental.

Aquí teneis mi tema preferido de toda la discografía de The Doors: Riders on the storm. La canción es una pieza indispensable en la historia del rock psicodélico. La obra pertenece album L.A. Woman, y fue el último disco del artista Jim Morrison; con ella se rinde un peculiar homenaje al psicópata Billy Cook.



No tiene sentido hacer referencia a la historia de The Doors sin dedicar unas líneas al máximo artífice del éxito del grupo: Jim Morrison.

En pleno apogeo éste decidió tomarse un pequeño descanso: hay quien dice que el verdadero motivo de esa desconexión era la necesidad del artista de un reecuentro espiritual consigo mismo. París fue la ciudad elegida, y fue el la capital gala en la que vivió Morrison hasta el 3 de julio de 1971, día en el que se apagó la luz de Jim como consecuencia de una sobredosis. El barrio de Marais de la ciudad parisina lloró su muerte, al compás de las lágrimas de todo un planeta. Mucha es la mitología acerca de los últimos días del artista. Se especula incluso con la posibilidad de que no falleciese, apoyando dicho argumento muchos de sus "fans" más acérrimos. En cualquier caso un mito de la música falleció dicho día.

Morrison: provocativo, transgresor; espiritual, virtuoso... Un personaje clave para la comprensión de las inquietudes de una sociedad, la de los años sesenta y setenta, ávida de emociones fuertes y de la liberación de las cadenas de una cierta opresión social. La imagen de The Doors siempre se encontrará encabezada por su figura.

Light my fire, The unknown soldier, Touch me, Love her madly, L.A. Woman... La obra del grupo perdurará a lo largo de los años como lo que es: una extraordinaria aportación a un mundo tan mágico como el de la música.

1 comentario:

El Cinema de Hollywood dijo...

The Doors es un grupo referente en la historia de la música. La potente y particular voz de Morrison convierte sus trabajos en algo único y con un sello propio. Desconocía el hecho que el grupo continuara durante dos años más. Como siempre Manu's Site nos ilustra y amplía nuestro conocimiento en cada uno de sus artículos.